Aunque suene raro, esta sopa no tiene nada de sopa y mucho de postre bizcochuelo; y tampoco es inglesa sino que su origen es italiano (zuppa inglese). Sea como sea, vale la pena disfrutar de su delicioso sabor.

Ingredientes

Para la masa del bizcochuelo:

8 huevos
1 ¼ taza de azúcar
1 cucharadita de esencia de vainilla
3 tazas de harina

Para hacer el almíbar:

1 taza de agua
1 taza al ras de azúcar
2 cucharaditas de ron

Para el relleno:

1 kg de crema de leche
150 grs. de azúcar glacé o impalpable
1 cucharadita de esencia de vainilla
200 grs. de frutillas

Preparación

Batir los huevos, agregar el azúcar y seguir batiendo insistentemente hasta formar una crema. Añadir la esencia de vainilla.

Ir agregando poco a poco la harina con movimientos envolventes.

Enmantecar y enharinar un molde de torta grande (40 cm. de diámetro y 20 de altura) y cocinar durante 25 minutos a 180 ºC.

Desmoldar sin dejar enfriar, sobre una rejilla, pues de lo contrario puede adherirse. Luego sí, dejar enfriar.

Mientras se enfría, batir la crema de leche con el azúcar impalpable. Aromatizar con la esencia de vainilla, y añadirle la mitad de las frutillas en trocitos.

Preparar el almíbar mezclando los ingredientes indicados.

Una vez frío el bizcochuelo, cortarlo por la mitad (a los ancho) y humedecerlo con el almíbar. Luego cubrirlo con la mitad de la crema que hicimos para el relleno. Taparlo con el bizcochuelo, y sobre esta tapa, también humedecida con el almíbar, colocar otra capa de crema. Decorar con las frutillas restantes.