La dieta vegetariana es muy eficaz para quienes sufren esta dolencia, ocasionada por la gran cantidad de ácido úrico, que no puede ser eliminado por la orina, más frecuente en el sexo masculino y en mujeres postmenopáusicas.

Por supuesto, la consulta al médico es indispensable. Será este profesional quien prescribirá los medicamentos que correspondan. Nosotros aportamos la parte de las comidas.

Volverse vegetariano deja de ser una opción para convertirse en una necesidad, ya que están completamente prohibidas, las vísceras, las anchoas, los mariscos y las sardinas.

Sin embargo, no todas las verduras son recomendables, debiendo evitarse, los espárragos, la lechuga, las espinacas, los tomates, las legumbres, los rábanos, el apio, el perejil y el berro.

Una alimentación a base de cereales, arroz, pastas, huevos (poca cantidad) y las siguientes verduras: calabaza, patatas, maíz, remolacha, champignones (moderados) y cebolla, evitará el progreso de la enfermedad. Entre las frutas son altamente recomendables las frambuesas, las manzanas y las frutillas.

Debe beberse grandes dosis de agua, para facilitar la formación de orina que arrastre los desechos, aunque también debe tomarse en cuenta, que las únicas gaseosas permitidas son las light. Los jugos de frutas también deben ser descartados, al igual que las bebidas alcohólicas. Puede tomarse café o té, solos o con leche, y agregarse azúcar moderadamente.